BATERÍAS DE ALMACENAMIENTO: un paso decisivo para impulsar el autoconsumo energético

Fuerte impulso a los sistemas fotovoltaicos con las nuevas baterías más eficientes

La capacidad de almacenar electricidad, para disponer de ella en momentos de baja producción o durante las noches, será un paso decisivo para impulsar la instalación de sistemas fotovoltaicos en hogares y empresas, y fomentar así el autoconsumo energético.

Hasta ahora, los altos precios de las baterías y la compensación de los excedentes volcados en la red hacían que la instalación de baterías no resultara atractiva para el consumidor final. Sin embargo, la caída de los costes de los sistemas de almacenamiento y la reducción de los precios para la compensación de los excedentes, han convertido las baterías de almacenamiento en activos clave para fomentar los sistemas de generación fotovoltaica.

Los recientes avances tecnológicos han conseguido además que las nuevas baterías sean cada vez más eficientes. Ahora tienen una mayor vida útil y ofrecen una alta densidad de energía, entre otras ventajas respecto a las baterías primitivas. La clave es que permitirán controlar de manera independiente el uso de la energía que genera un sistema fotovoltaico.

Autonomía energética

Las nuevas baterías permiten a los usuarios una gran independencia respecto a la red eléctrica, especialmente en áreas remotas donde el acceso a la electricidad puede ser limitado o inexistente, así como en horas de baja producción solar y durante la noche.
El usuario podrá contar además con un respaldo en casos de emergencia:  durante cortes eléctricos, las baterías pueden proporcionar una fuente de energía continua, garantizando el funcionamiento de dispositivos críticos.

La maximización en el uso de la energía solar, mediante el almacenamiento del exceso de energía generada durante el día para su uso durante la noche o en días nublados es sin duda otra ventaja decisiva. Como lo es el ahorro de costes energéticos, ya que se reducirán sustancialmente las facturas al usar energía almacenada en lugar de comprarla a la red, especialmente en horas pico cuando las tarifas son más altas.

Beneficios económicos

La reducción de costes a largo plazo es quizá el principal beneficio derivado del autoconsumo energético. En algunos casos la inversión inicial puede ser alta, pero a largo plazo supone ahorros significativos en costes de energía e igualmente la bajada de los precios en los sistemas de almacenamiento hace que día a día el atractivo económico sea más interesante para el usuario final.

Hay que tener además en cuenta el capítulo de incentivos y subvenciones; existen notables ayudas oficiales al autoconsumo, como los programas de algunas comunidades autónomas o los descuentos en el IRPF o el ICIO.

Energía Limpia

El autoconsumo supone también un impulso al uso de la una energía limpia. La posibilidad de almacenar energía durante las horas de baja demanda y liberarla durante las horas pico ayuda a equilibrar la carga en la red eléctrica, impulsando una mayor eficiencia energética de los sistemas. El uso de baterías de almacenamiento facilita además una mayor implantación de energías renovables en la red eléctrica, contribuyendo a la reducción de las emisiones de carbono y a la lucha contra el cambio climático.

Por otro lado, mediante los sistemas de monitorización y gestión, el usuario cuenta con mayor control sobre cómo y cuándo utilizar la energía generada por sus paneles solares, aumentando la eficacia del sistema, ya que las nuevas baterías tienen una alta eficiencia, durabilidad y capacidad de gestión inteligente a través de sistemas de software.

La posibilidad de almacenar energía solar reduce la necesidad de recurrir a fuentes de energía no renovables, lo que contribuye a un entorno más limpio y sostenible al fomentar el uso de energía verde y reducir la contaminación.

El uso de baterías solares resulta hoy esencial en la industria y el comercio, puesto que la integración de las baterías de almacenamiento en los sistemas de generación fotovoltaica optimiza los costes operativos y permite planificar de manera efectiva las necesidades de consumo, contribuyendo a la reducción de las emisiones de CO2.

MATRA SOLAR es muy consciente de estas necesidades empresariales y de la importancia de elegir correctamente el tipo de baterías a instalar junto al sistema solar fotovoltaico, por ello ayudamos a dimensionar el sistema necesario y el tipo y número de baterías.

Nuestro objetivo básico es aumentar la eficiencia energética, de acuerdo con los consumos reales de cada instalación.

Las baterías son elementos formados por celdas químicas, con un polo positivo y otro negativo, en las que se produce una reacción que transforma la energía química en eléctrica. Así podemos encontrar los siguientes tipos de baterías en instalaciones fotovoltaicas:

TIPO DE BATERIACOSTOMANTENIMIENTOVIDA UTILEFICIENCIADENSIDAD ENERGETICASEGURIDAD
Monoblock (plomo / acido)bajomoderado 3 – 5 añosmoderadabajamoderada
AGM (plomo / acido selladas)moderadobajo4 -7 añosbuenamoderadaalta
Ion Litioaltomuy bajo10 – 15 añosmuy altaaltaalta
Flujo redoxaltobajomuy largamoderadabajamuy alta

Cada tipo de batería tiene aplicaciones específicas según las necesidades del sistema fotovoltaico, el presupuesto disponible y las condiciones operativas. Las baterías de iones de litio son actualmente las más populares debido a su alta eficiencia y larga vida útil, a pesar de su coste inicial elevado. 

En definitiva, impulsar el autoabastecimiento en las empresas es una estrategia idónea para lograr la independencia ante las fuentes de energía externas y lograr un menor impacto ambiental, consiguiendo al mismo tiempo autonomía y una mayor eficiencia energética. Matra Solar puede ser el socio más eficaz para apoyar estos cambios en el mundo empresarial, y acompañar a cada empresa en todas las fases, desde el diseño hasta la puesta en marcha de un sistema fotovoltaico.